lunes, 17 de junio de 2013

De sur a norte

Abrazado a tu cuerpo como el tronco a su tierra,
Con todas las raíces y todos los corajes,
¿quién me separará, me arrancará de ti,
Madre?…
Madre España de Miguel Hernández

Pz. España (Sevilla)
-Tiene un bocadillo, de lo que sea-, responde -zeñor, no se ha fijado ud., ¡esto no es una bocadillería!-, me sube un cierto sonrojo sorpresivo, sigue – Tengo unas tapitas y raciones muy variadas-. Busco algo rápido de acuerdo a la situación. Justifico – no quiero raciones ni tapas-, pero rápidamente hecho una ojeada a la carta de tapas y raciones elaboradas. No me lo pienso  mucho – Un salmorejo-.



El sol se ha dejado sentir durante todo el día, hasta tal punto que el tránsito sol – oscuridad es imperceptible. El lugar deja sentir un cierto aire señoritingo, con ciertas vestimentas finas, acompasados de dulces finitos, donde un gracioso acento adorna las palabras con la precisa gracia.

Es al acaecer de la madrugá y con el enfile de los primeros rayos es cuando un cansino trotoneo me acerca a la ciudad.  Quiero acercarme a su ribera y desplazarme en su largo paseo, pero un singular cruce de calles me adentra en el arbolado parque, siento el frescor de su riego tempranero y su olor húmedo penetra en mi cuerpo llenándome de bienestar. No lo dudo correré en el parque, daré las vueltas precisas para empaparme del lugar.
Catedral Santiago de Compostela

Son los momentos que me hacen sentir afortunado de poder disfrutar de lugares y espacios a mi manera, bajo mi lento trontoneo e inquieta mirada que escudriña entre la filigrana de edificios, mientras el Sol lentamente va adueñándose de todo lo que ilumina y más.

Un rápido  e insólito viaje de sur a norte de manera flaseada me ha mostrado  paisajes, culturas, peculiaridades, dejes, lenguajes, gracias, ritos, climas y temperaturas. Amplio conglomerado etnográfico, que hacen que sus gentes se identifiquen bajo el nombre de España, hinchándonos de orgullo y honor.

JMR
Además de morir por ti, pido una cosa:
Que la mujer y el hijo que tengo, cuando pasen,
Vayan hasta el rincón que habite de tu vientre,
Madre.
Madre España de Miguel Hernández

2 comentarios:

Eladio dijo...

Como tengas que devolver la visita al colega si que vas a recorrer mundo ;-)

Lagunero dijo...

¡que va!, no admito viajes más allá de Camuñas.